Hoy nos hemos reunido para recordarte. Hoy hace 2 meses y 4 días que te fuiste de nuestras vidas de forma efímera. Es imposible que no me salten las lagrimas al recordar todo lo que has significado en nuestras vidas y lo que esta significando ahora mismo tu perdida.
Desde que te fuiste
no dejo de escribir, de escribirte. Pero no encuentro la palabra
exacta que pueda llegar a definir lo que fuiste para nosotros. Eres
sangre de mi sangre, el orgullo que corre por mis venas sin cesar. El
motivo de mi vivir durante casi 20 años, y el motivo que seguirás
siendo durante toda mi vida. Porque tu te ganaste el cielo día a día
cuidando a los tuyos, amándolos sin esperar nada a cambio, luchando
para que todos fuéramos felices, eso era lo que te hacia vivir.
Para muchos de
nosotros eras la esposa, la mamá, la yaya, la hermana, o la vecina.
Pero para todos siempre seras una gran persona que ha pasado por
nuestro corazón dejando una huella imborrable.
Gracias por dejarnos
compartir la vida contigo y hacerla más llevadera porque te teníamos
al lado, haciéndonos sonreír a cada instante. Ahora no estas
físicamente a nuestro lado, pero te tenemos guardada en nuestro
corazón, por siempre, se nos llena la boca de orgullo al hablar de
lo fantástica que fuiste en vida. Porque solo tu nos has enseñado a
querer con el corazón, contigo aprendimos a dar la vida si se ama.
Espero que te estén
cuidando muy bien des del cielo, que es donde te mereces estar y
gracias por seguir cuidándonos desde allí arriba.
Nunca te vamos a
olvidar. Te queremos y te echamos de menos. Tu familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario