domingo, 29 de julio de 2012

La vida al 100%

Le buscamos demasiado sentido a las cosas cuando realmente todo es tan transparente que nos asusta y no nos lo creemos, cuando vemos que no es como pensábamos nos asustamos y rebuscamos en cada momento y en cada palabra alguna pista que nos lleve a lo que realmente deseamos, pero esto no funciona así. Muchas veces la vida te proporciona momento con los que hemos deseado toda nuestra vida y una vez los tenemos, los vivimos pero la cagamos por ambiciosos, por desear mucho más de lo que ya nos daban. Somos animales y nos cuesta conformarnos con lo que tenemos, no nos basta, siempre queremos más y más, hasta que se agota y aun así seguimos exigiendo. Este es el gran problema, la ambición, el egoísmo, deberíamos aprender a administrar las cosa y vivirlas como tal, como lo que son, sin buscar nada más de los que nos muestran porqué son un verdadero regalo en forma de momento, quizás así, podríamos vivir al 100% de aquello que llaman vida.

sábado, 28 de julio de 2012

Tocar con la realidad


Cuando se esfuma de golpe una persona importante de nuestra vida nos aferramos a las últimas cosas que dejó en vida, como un objeto personal o alguna pequeña señal que nos dejo antes o después de partir de este mundo. Inconscientemente esos pequeños objetos nos mantienen cerca de la persona que queremos, engañando a nuestro cerebro haciendo que disminuya de cierta forma nuestro dolor porque tenemos algo a lo que aferrarnos, algo físico. Es como si entre la tierra y su cielo hubiera algo más que nos comunique con ellos, como un teléfono que podemos tocar y enseguida conectamos con la persona que más echamos en falta. El problema aparece cuando esa conexión se extravía, se pierde porqué el azar otra vez así lo ha decidido y nos sentimos de golpe desprotegidos, vacíos, volvemos a sentir ese dolor inicial que vivimos los primeros segundos de conocer su perdida, tenemos la impresión de que ahora si que no existe nada más a lo que recurrir, a lo que agarrarse porqué por primera vez en mucho tiempo, has tocado con la realidad.

jueves, 26 de julio de 2012

Nuestro final de primavera

Nuestro final de primavera fue genial, la vida nos regaló efímeros instantes de sol a nuestras vidas porqué al fin y al cabo nuestros corazones siempre se han merecido pequeños latidos de felicidad. Pero como todo, las estaciones cambian y terminan y así acabo nuestro espejismo de sensaciones que duro hasta el principio del verano, con el cambio de las ojos también mudo nuestra pasión ejerciendo sobre nosotros una gravitación negativa haciendo cambiar el latir de los sentimientos y de los momentos. Pero como todo en está vida tiene su sentido y su recuerdo y hoy no miro con nostalgia triste ni resentida aquello que fuimos, miro con los ojos felices de haber vivido lo que tuvimos porqué siento dentro de mi que me lo merecía, nos lo merecíamos y nos dimos algo  de forma mutua sin esperar nada a cambio, simplemente no hacían falta pactos ni contratos estereotipados exigiendo un beso de más o un beso de menos porque simplemente lo hacíamos de forma natural. En mi corazón siempre renaciera un buen recuerdo, pero será eso, un recuerdo, nunca más volverá ese tiempo porque lo agotamos y tiramos las pocas fichas que nos quedaban por la borda. Pero es importante porqué lo vivimos y las cosas bonitas hay que saberlas recoger y guardarlas como un tesoro.

Esperanza hueca

Empezando a recordar mi pasado me han venido a la mente esas peleas eternas con unas de las personas que más me quieren y quiero. Eran locura dentro del caos, el volcán que estaba a punto de estallar solo con tentar un poco a la suerte, insistir un poco más en derribar los muros que tanto me había costado construir para acabar derrumbandome. Una vez sucedía eso mi cuerpo dejaba de funcionar como tal, mis piernas empezaban patear todas las partes de la casa como buscando una salida, mis brazos no dejaban de moverse, intentando con las manos romper algo para escapar de esa cárcel, sentía los nervios a flor de piel, esa sensación tan limite de no poder controlar tu fuerza, de sentir que las manos se te van e intentas golpear cualquier cosas para saciar un poco más ese instinto animal que te surge cuando has tocado fondo, solo se me ocurría cerrar los puños, intentar sentarme esperando una respuesta positiva que me alegrase un poco más la vida, pero llenaba el cuarto de lágrimas, de suplicas de desesperación, de esperanza hueca.

Hoy te escribo por primera vez


Hoy repasando sobre lo que he escrito y a quien le he escrito me dado cuenta de que nunca te dedicado unas líneas en mi vida y es sorprendente que justo ahora lo este haciendo. Quizás nunca lo hice porqué no siento nada por ti y por eso soy incapaz de dedicarte algo o porque es algo que lo llevo tan dentro de mi que no lo puedo llegar a expresar de forma clara. Pero mi vida desde pequeña se ha basado en la ignorancia para ahuyentar el dolor para pasar posteriormente a ese olvido al cual le temo tanto. Alguna que otra vez me planteado que tal seria mi vida si tu hubieras formado parte de ella, seguramente no seria quien soy ahora, quizás seria algo más débil pero con una pizca más de seguridad y en mi permanecería algo más que tus ojos. Pero no te culpo, no sé con qué hacerlo y no sé porque está distancia pero tampoco necesito más de lo que tengo. En mis entrañas resurgen momentos que reflejan crueldad hacia ti llevado por las circunstancias, recuerdo las peleas, con los portazos, los golpes, la rabia recorriéndome los brazos casi temblando, esperando una respuesta a ese caos que me nublaba la vida y me desesperaba porque me sentía encerrada en algo que no me pertenecía, me hacían sentir culpable del maltrecho destino y entonces pensaba en huir, pero... ¿Hacia donde? No tenia dónde ir como otras personas, no tenia ese segundo apoyo pero solo lo necesitaba en espejismos, eran pequeñas distorsiones de mi realidad. Supongo que llegará el día que me siente en una mesa y todo se esclarecera, espero que no sea de forma casual, mi corazón no lo soportaría, siento inmenso pánico al encuentro, quizás si se supiera empezar de 0 sin rencillas, sin reproches, sin una explicación porque ni yo misma la sé, se podría hacer bien. Pero ahora no, ahora no la necesito.

Hoy por primera vez, te he escrito.

domingo, 22 de julio de 2012

Ciudades anónimas

El hecho de viajar quizás nos hace sentir un poco más libres, sentimos el anonimato en nuestra piel cuando pisamos el asfalto de una ciudad desconocida a la cual le otorgamos la responsabilidad de hacernos sentir sensaciones nuevas. Cada paso que avanzamos es una máquina de hacer recuerdos, el primer bar en que pediste ese cubata mal mezclado, el segundo garito oscuro que te metiste por equivocación, la discoteca en la cual fuiste más tu que otras veces... Buscamos pequeños placeres que yacen dormidos en nuestro interior que solo con la combinación perfecta estallan en el mayor éxtasis jamás sentido.

jueves, 19 de julio de 2012

Eternamente

Hoy escribiré des del fondo del corazón, hoy desgarro mis palabras a fuego lento con la sangre de mi palpitar ese que solo resurge cuando la soledad y el dolor ensalza mi día a día recordándome el lado más oscuro que me presento la vida un día frio de Diciembre. Malvivo de recuerdos y de descuidos que me duelen más que cadenas en el cuello, me castigo a mi misma intentando afrontar esto de la mejor manera posible, ignorando la realidad lo suficiente como mantenerme en pie y tirar de los que más quiero, de los que más te querían por tu empeño y cariño diario. Miro a mi alrededor y encuentro el vació que dejaste de forma inexplicable en aquella fría cama un día tan normal como hoy, dónde te levantaste con la ilusión de siempre para vernos sonreír. Le suplicábamos a la vida que te diera un suspiro más, un empujón más para poderte mantener a nuestro lado pero el abismo nos hizo caer en la realidad de que te fuistes, que ya no estabas. En mi interior algo se movía, quizás la intuición de meses anteriores de que algo así sucedería pero autoengañandome a que eso no podría pasar por las circunstancias vividas. Y así fue, te fuiste golpeándonos, seguro que a ti también te dolió la perdida pero espero que ahora estas en el sitio que te mereces, en el cielo, el mejor cielo dedicado para el ángel más preciado de nuestra vida. Pero es indudable que te eche de menos, los recuerdos me abruman cuando se plasman situaciones vividas contigo pero sin estar tu de protagonista, dabas vida y sentido a todo lo que sucedía, por eso eras tan especial. Te quiero y jamás te olvidaré, pasaran los años y quizás los recuerdos se desvanecerán pero lo que me marcaste en mi vida esta grabado a fuego lento con un amor imborrable y eso es lo que te hace revivir cada vez que te pienso y te recuerdo en los momentos más felices de mi vida, gracias por darme tanto con tan poco, siempre te querre eternamente.

martes, 17 de julio de 2012

Caricias en tu espalda

Acariciaba su cuerpo con enorme cautela procurando no romper ningún centímetro de la magia que nos envolvía y nos recorría las entrañas en aquella habitación, un oscuro mundo lleno de deseos inexplorables e irrealizables pero nos encantaba torturarnos de esa forma, entre besos y abrazos fluiamos entre sábanas. Vivíamos para hacernos eternos, sonreiamos para curarnos un poco más, nos hablavamos para sentir placer, llegamos al éxtasis utilizando miradas, retorciendo palabras entre besos y beso, entre caricia y caricia, entre mirada y mirada deshojábamos las horas del día hasta llegar al momento crucial de despegar los cuerpos unidos por la pasión por la llegada de un nuevo día y la realidad nos abrasaba la piel, nos quemaba el corazón haciéndonos enloquecer con la fría ausencia de la distancia.

domingo, 15 de julio de 2012

Basura interior

Lo que me gusta más de esta jodida vida son los momentos efímeros de alivio mental, ese tipo de magia de escapismo que nos regala el cerebro. Nos limitamos a tumbarnos en la cama o en el sofá y nos ponemos la música a todo volumen, automaticamente elegimos una lista de música creada inconscientemente por nuestro corazón y nos aliviamos escuchándola, sentimos cada ritmo en la piel, cada frase de la canción nos describe perfectamente y nos da la sensación que por lo menos alguien nos esta entendiendo, está entendiendo todo que se mueve en nuestro interior y nos hace sentir más liberados, más ligeros, ese pequeño momento de soledad nos ha echo sacar la basura de nuestro interior.

Huellas en su colchón

Dejé mi aroma en su almohada pa que se acordará que en las noches más frías le serviría mi cariño en bandeja para aliviar su latir irregular, recordándole que la vida era algo más que una serie eterna dónde los capítulos cambian a diario por acontecimientos inesperados e incontrolables. 
Le deslice mis labios por todo su cuerpo para que recordará que aunque la vida fuese puta y nadie la besara siempre habría un rincón de su cuerpo que me pertenecía eternamente, llegando hasta a lo más hondo de su corazón. 
Le marqué a fuego lento con mis brazos rodeando su cuerpo mostrándole que el mundo se derrumbaba pero que si te abrazan la caída es menos dolorosa. Y así fue como poco a poco fui dejando algo de mi en un colchón que en el momento más imperfecto me perteneció.

viernes, 13 de julio de 2012

Cuando fue la última vez que..

¿Cuando fue la última vez que lo sentiste? Me pregunto con ojos tristes anhelando en esa pregunta un poco de luz a la situación, buscando una respuesta para consolar su vació causado por la falta de amor ya que de pasión rebosaba pero era consciente que con eso solo se malvive durante unos días, nunca fue eterna la pasión. 


Conteste impasible ante tal pregunta, era consciente de la magnitud del momento y de lo que mi corazón latía, en el se hallaba la respuesta a cualquier tipo de dolor marcado por una lucha encarnizada con el corazón y la cabeza. Era tan sencillo, tan fácil. Me limité a mirarle a los ojos, fueron los segundos más sinceros de mi vida sin decir ni una sola palabra, nuestros ojos hablaban más de lo que nuestros labios callaban y eso valía más que cualquier frase mal pronunciada a las 4 de la madrugada mezclada con alcohol. Al fin, mis labios decidieron hablar y pronunciar lo que mis ojos no dejaban de gritar y mi corazón nunca había dejado de latir: "No existe última vez porque nunca he dejado de sentirte".

Otro jodido día

Salí de casa en busca de algo de evasión, bajo a mi portal y me enciendo mi pitillo, jodida nicotina siempre tan presente cuando mi vida empieza a encogerse y yo apenas sin poder moverme ni darle una pizca de emoción, pero siempre me ha sido fiel, nunca me ha hecho una pregunta de más y tampoco me a echado de menos. Recorro el mismo camino de siempre mis pasos me guían siempre hacia el mismo rincón escondido de algunos ojos presentes en mi corazón, recapacito sobre todo lo que se mueve en mi interior, no lo puedo describir no encuentro frases para poder expresarlo de forma clara y consciente sin recaer en los típicos tópicos que me han acompañado siempre durante toda mi vida. Revivo el último segundo más importante de mi vida y me derrumbo de nuevo, es otro jodido día en esta ciudad.

Casi feliz

Hoy después de tanto tiempo sin escribir por faltar de inspiración moral vuelvo a recaer en el mismo humo de siempre que empaña los cristales de esta habitación, de este cuarto sin ventanas que ha creado mi corazón. Sigo en pie a pesar de mil patadas en el estómago, sigo luchando después de dos mil besos grabados en mi piel, sigo malviviendo en esta rutina adherida a mis paso sin dejar de perseguirme por cada calle de esta maldita ciudad. Ya no huyo, me siento casi feliz.

sábado, 7 de julio de 2012

Libertad agarrada

Me Encanta cuando me hablas de libertad agarrada a mis caderas, tumbados en el colchón que irradia pasión por cada centímetro de las sábanas que nos enredan testigos de algo totalmente irracional. Como comprender que a 100 Kilómetros de mi cama se encuentra mi alivio, como entender que compartiendo tu aire llenas mis pulmones ayudándome a intensificar mis latidos recorriendo todo mi cuerpo con tus besos, como dar explicación a esta situación que nos ha hecho perder la razón. Dejamos que todo esto nos guié en un camino aun por descubrir, sin unos pasos marcados, con un futuro por conocer.

Frío día de Diciembre

La vida de vez en cuando nos muestra su lado más negativo, más oscuro con la muerte de un ser querido. No estamos preparados para ello, por eso cuando hablamos de esa persona nos cuesta pronunciar la frase "ha muerto" y buscamos derivados que nos permitan ocultar de cierta forma esa pérdida, buscamos consuelo en las palabras "se fue", "ya no está entre nosotros" y es así, por mucho que durante nuestro día a día intentemos tirara hacia delante, intentemos sonreír, sigue ahí esa incertidumbre de que abra sucedido, nos abordan las dudas de que hay después de todo esto y de cómo puede ser que un cuerpo lleno de vida de repente no esté, miramos su lápida releyendo su nombre intentando buscar respuesta ante tal acontecimiento sin apenas obtener resultado. De vez en cuando sientes su presencia cuando resurge su olor de repente en alguna parte de la casa y te da un atisbo de esperanza. Pero lo que hay después de todo esto nunca lo sabremos, nunca podremos recuperar esa mirada que se perdió un frío día del mes de Diciembre.

domingo, 1 de julio de 2012

Introversión dañina

No nos damos cuenta de que las palabras muchas veces las utilizamos como puñales, palabras que clavamos en los demás para generar una herida o simplemente reabrirla después de mucho tiempo intentándola cicatrizar a base de parches y curas intensivas, buscando algún paliativo para ese dolor causado. Si por un momento pensásemos en como utilizamos esas palabras, esa negatividad hacia ciertas personas y nos la aplicásemos a nosotros mismos, nos daríamos cuenta que las cosas no van bien, que esas mismas palabras te causarían un dolor implacable en tu interior, quizás hundiéndote más de lo que estás. Entonces, ¿Porqué seguimos? Si sabemos que nuestras palabras duelen.. ¿Porqué seguimos insistiendo, repitiendo una y otra vez eso que duele? El problema reside en la introversión permanente del verdugo, la apariencia traiciona haciéndolos más vulnerables delante los demás, proporcionando esa facilidad para herir a causa de la inexpresión, su sonrisa es utilizada como escudo para que reboten esas sucias palabras dañinas, pero si realmente supieran como rebota en su interior, entenderían que es mucho mejor replantearse sus actos dos veces.

Reset


Lo que es realmente extraordinario es la fuerza de resurgimiento del corazón, como agarra las oportunidades para reconstuirse de una forma tan natural. Confieso que toqué el suelo, quizás hasta lo más hondo, mucho más que el día que te fuistes a mejor vida.. Creo que verdaderamente fui consciente de la magnitud de la vida y todo lo que ello conlleva, pensé que me cure de tristeza, que tu recuerdo seguía latente pero poco a poco fui disfrazando el dolor, ocultándolo en exceso por no saber exteriorizarlo para al final reventar de la peor forma. 

Reventaron todos los dolores encarcelados en estas cuatro paredes presentes de una negatividad patente en cada respiración en esta casa, sonando el eco de despedidas improvisadas uniéndose con todo lo que en mi interior se removía. Finalmente decidí huir, huir de todo esto como lo solía hacer anteriormente, pero esta vez era diferente a las demás, yo no tenia que huir ese día, yo no tenia que coger ese tren, pero los factores lo hicieron así, hicieron que mi corazón luchara por ir a esa ciudad para rescatar algo que se estaba naufragando por errores involuntarios, pero responsabilizándose de ellos en todo momento. Y así fue, vi lo que necesitaba, sentí lo suficiente para choca contra la realidad para luego aceptarla y seguir mis pasos como siempre quise hacer. Seguí mi camino entre andenes para acabar viviendo para mi, para siempre.